Billar

Entré rodeado de mis colegas entre risas y codazos en aquel antro de mala muerte. El ambiente estaba cargado de humo y sudor como siempre. Ya era casi un olor familiar que implicaba unas eternas partidas de billar. Mientras Jimmy, Carmelo y estos decidian quien pagaba la primera partida, eche una ojeada al bar. Y la vi. Era extraño que no me hubiera fijado antes en ella. Era desulumbrante, brillaba con luz propia entre la sordidez del ambiente y los gritos. Apoyada en la barra, me miraba con sus ojos acuosos. Su larga melena de trigo era un canto de sirena y el Ulises que os lo cuenta se habia olvidado taponarse los oidos. Su piel de canela tiró un anzuelo que, por arte de birlibirloque, se ató a mi ombligo. Me habia ido acercando poco a poco como un automata idiotizado. Entonces mi brazo, con voluntad propia, la tocó. Su piel era de hielo, como las manos de todas las mujeres, pero su textura era... era... era suave hasta limites que un pobre diablo como yo no tiene derecho a tocar. y sin mediar palabra nos fundimos en un beso. Un beso largo humedo y violento. Su frescura restallaba contra mi lengua. Sus labios amargos humedecieron los mios secos como el aire del desierto. Pero todo se acaba. Ella me apreto un poco más y luego me solto. Se fué. Me dejo solo de nuevo. Mire mis manos donde minutos como siglos antes la habia sujetado. Me encogi de hombros y con una sonrisa sardonica grité:
-¡¿Me pones otra cerveza?!


Por la única que nunca me falla,
Birlo

He visto cosas que vosotros no podriais creer...

Nihilismo puro...

La mierda cantante y danzante

Carpas y salmones

La carpa nadaba con fuerza contra la cascada del estanque ante la divertida mirada de todas las carpas. Señalaban con sus aletas y se mofaban. La carpa se sentia sola y estupida pero algo en su interior le decia que no podia parar de nadar.
Al final, un dia, con esfuerzo consiguió saltar la casacada. Apareció en otro estanque mucho más grande. Una preciosa pececita se le acercó nadando.
-¡Hola! ¿Eres nuevo por aqui?
-Pues si. Soy un carpo.
-¡Que va! Eres un forzudo salmón
-Hombre, sabre lo que soy ¿no?
-pues eres un salmón, te lo digo porque yo soy una salmona... ¿Oye te apetece que nos tomemos algo algún dia?
A veces, hace falta insistir para llegar a ser algo más...
Insistiendo,
Birlo

¿Pesimista, yo? ¡Pesimista tú!

Me habeis dicho muchas veces que veo siempre el lado malo de la vida, todo de color de negro, que soy un pesimista, que no todo es una mierda...bien, hoy escribo esto para aclarar terminos. No soy un tio pesimista. Es verdad asi que borrad esa mirada esceptica de vuestras caras.
Lo único que pasa es que siempre pienso que si algo puede salir mal, saldrá mal. ¿Porque? si me hago esperanzas y sale mal, me decepciono. Si me decepciono, estoy mal. No quiero estar mal.
Por otro lado, no me gusta confiar en la gente. Mientras que otros presuponen la inocencia de la gente, yo presupongo su culpabilidad. Si alguien te la puede clavar, lo hará. Eso, además de evitarme muchos daños internos y puñaladas traperas, hace que mis amigos sean mucho más especiales y tengan confianza total en ellos. Aunque tambien hace que tenga muchos menos (quizá influya el que no sea el tipo más agradable y normal del mundo). Pero como aquel eslogan: "Calidad antes que cantidad".
En fin, queria dejarlo claro. Plantearos esto ante de volver a llamarme pesimista. Simplemente, no confio en el mundo.

Afectuosamente,
Birlo

Cruzada

Salió a la calle. El viento le despeinaba y le enfriaba las manos, pero su sonrisa iluminaba el día. Las hojas, que bailaban con sus zapatos, formaban un ocre tapiz sobre la acera gris. El muchacho comenzó a silbar una tonadilla mezcla de la "Marcha Nupcial" y la "Guerra de las Galaxias". Tenia el claro presentimiento de que todo saldría bien. Era una de esas mañanas que uno tiene un sol interior.
Debian de ser las dos menos cuarto en aquel cruce de una calle cualquier del sucio Madrid. Nuestro amigo volvia mordisqueando un trozo de pan recien hecho y la mochila colgada al hombro. Y entonces la vió...quizás deberia decir lo vió: un milagro, un sueño, la personificación de la palabra belleza. Y ella lo estaba mirando con unos ojos como la lanza de Longinus, traspasando con fuego y bondad su debil alma, su carne blanda.
Aquella chica...aquella chica no era normal. No podia serlo. Era un ser sobrenatural que habia llegado a la tierra para tocarlo con aquella mirada. Nunca hubiera soñado cruzarse con una chica asi. Pero fue entonces cuando lo descubrió. No solo le estaba mirando. Le sonreia. A él. Solo a él. Nadie es capaz de soportar esa sonrisa. Dicen que hubo un valiente que lo intentó...fracasó miserablemente. Y sus pies no respondieron. Echaron a andar sin orden de hacerlo. Fue como
aquel que con los ojos vendados anda por el borde de un precipicio.
Y la chica siguió mirando cuando miles de gotas carmesi saltaron y besaron su piel. Cuando un chillido salió de su garganta. Y como dos pozos sus ojos miraron lo que habia sido aquel chico cruzando la calle medio embobado. Lo que eran los restos despues de haber sido golpeado brutalmente por una furgoneta de reparto.

Deberia mirar hacia los lados,
Birlo

100 cosas que me gustan

Una chica me dijo el otro dia: "Odias demasiadas cosas pequeño Birlo". Bien, para demostraros a todos que tambien me gustan ciertas cosas ahi va...

1. La cerveza fresquita
2. El primer piti a las 8 y media
3. El olor a tierra mojada
4. La mayonesa
5. Las conversaciones telefonicas
6. Los filosofos deprimentes
7. Escribir en el metro
8. Silbar
9. Bailar de manera estupida cuando algo me sale bien o quiero disimular un fallo
10. Rascarme
11. Saltar y encoger las piernas
12. Jugar con las llaves
13. Dibujar
14. La Guiness
15. Friends
16. La estetica Grunge
17. Chtulhu
18. Los dados de más de diez caras
19. Los comics
20. El Bankai de Ichigo
21. Los chistes malos
22. Por ampliación al 21: Los chistes malos y facilones sobre sexo
23. El Sexo
24. Los guantes de mendigo
25. Los gorros estupidos
26. Suspirar
27. Mi mirada de desprecio
28. La risa de chalado de Serugio-sama
29. Robe Iniesta
30. El olor de los libros nuevos
31. Comprar tonterias en las papelerias
32. La Inciclopedia
33. El cine en blanco y negro
34. La Coca-cola en cantidades industriales
35. Las patatas fritas cuando estoy de resaca
36. Comer esparragos
37. Las teorias estupidas
38. Los IGNobel
39. Tú (Te lo has creidooooo, ni de coña)
40. Los ojos de colores raros
41. Una caña
42. El Calimotxo
43. El olor a madera quemada
44. Cuando como un chicle de menta picante y al sorber parece que te entra frio en la boca
45. Las conversaciones sin sentido
46. La risa de una chica
47. Oler a Kuky
48. Hablar con la Rubia
49. Dejarte mal
50. Sangrar
    
51. Los guantes de latex
52. El polvo de talco
53. El olor a pintura
54. Uma Thurman
55. HOUSE M.D.
56. La lasaña de mi vieja
57. Meterme en la cama
58. La lluvia
59. La plaza del Vati
    
60. El Capitan Capullo
61. Ser más friki que tú
62. Matar emos
63. Bajo coacción las conversaciones con Shami
64. Leer blogs y flogs
65. Las conversaciones metafisicas con Serugio-san
    
66. El café caliente
67. El café con hielo
68. Desayunar y volver a meterme en la cama
69. La Hora Chanante
    
70. Willow
71. La lluvia
72. Los domingos perezosos
73. Encender la tele y que esten echando una peli que me guste
74. Encontrar la musica de algun anuncio molón
75. Mi almohada
76. La ropa vieja y gastada
77. Discutir de politica
78. Los cuervos
79. Por ampliación al 66: Muchachada Nui
    
80. La plata
81. Buda (Es gordito y feliz)
82. Hacer un gesto con la mano cuando me despido
83. Repantigarme en la silla
84. Resolver problemas lógicos
85. Hacer sudokus preparados por Creti
86. Eructar muy fuerte
87. Los Simpsons
88. Planear la conquista del mundo
89. El Smash Bros
90. El escalofrio que te da despues de mear
91. WWE: Raw
92. La música ambiental
93. La cerveza (sé que está repetida pero quiero resaltar lo mucho que me gusta)
94. La Metamorfosis de Kafka
95. Mirar al cielo
96. Hacer el chalado con Jazz
97. Cantar en la ducha: "Oh Fortuna"
98. Las frases lapidarias
99. El silencio
100. Hacer listas extrañas

Bueno, finalmente quiero aclarar que no van en orden...y que posiblemente sea el post más dificil que he escrito en mi vida.
A quien va dedicado, ya lo sabe...No odio tantas cosas XP

Gustandome,
Birlo

El cuento

Estaban sentados alrededor de un brillante fuego. Con el estomago lleno y suficiente tabaco en las pipas, la noche recién nacida animaba a los chascarrillos y las bromas. Poco a poco las risas fueron muriendo y más relajados, con las estrellas como techo, uno de ellos empezó a contar un cuento. No era el más joven, tampoco el más viejo. De hecho no destacaba como el mejor narrador. Pero el cuento a pesar de ser viejo como la Tierra, sonaba nuevo en sus labios.

-El látigo subió y bajó con la misma candencia durante siglos. La espalda de nuestro amigo estaba en carne viva, pero Dolor no dejó de castigarlo. Nuestro amigo lloró, gritó, se enfureció...hasta que se dio cuenta de la inutilidad de si mismo. Pero Remordimiento, el látigo, siguió bajando y subiendo con idéntica fuerza. El público apostaba sobre cuando se desangraría nuestro amigo. Pero él, a punto de rendirse, lo vió claro. Una determinación nació de los despojos y se reflejó como el brillo del acero en sus ojos. Se incorporó del suelo. Dolor lo miró sorprendido: -¡Al suelo, perro! Pero al levantar el látigo este se rompió por la mitad. Nuestro amigo estaba libre.
El circulo de amigos permaneció en silencio. Nadie queria romper el mágico silencio que habia nacido tras la bella historia. Pero una sonrisa estaba en los corazones de todos.


Birlo